“I will always love you”
San Valentín, el día del amor y la amistad. El día del año designado para decir un “te quiero”, un “te amo” y expresarlo con rosas y chocolates. A mí no me importa si se lo inventaron las dulceras y Hallmark (como dicen por ahí), cualquier excusa es buena para darle un poquito de alegría a la vida.
Ese día, para bien o para mal, sirve para reflexionar acerca de quienes queremos lo suficiente como para llamarlos amigos. También es un día que se presta para que se mal interpreten llamadas o mensajes de ciertas personas, pero eso es tema aparte.
Por mi parte, lo aprovecho para decirles a mis amig@s lo mucho que l@s amo y darles gracias por estar en mi vida.
¿Y el resto del año? El resto del año, en lugar de decir: “Te aprecio”, “Que dichoso soy de tenerte en mi vida”, nos la pasamos chismeando. Se nos olvida que la amistad no se puede dar por sentado, a los amigos hay que cuidarlos y apreciarlos, porque igual que nos los ganamos los podemos perder.
El ser humano es vicioso, se alimenta del dolor de los demás. No sé si es que está en nuestra naturaleza o si es algo cultural, pero así somos. Si no hay drama nos aburrimos. Nos llamamos amigos, pero cuando la piña se pone agria es que realmente sabemos quién es amigo de verdad y nos toca probar si nosotros lo somos.
El ejemplo más reciente, Whitney Houston. Tanto talento, admirada por millones, la voz de una generación. Claro, ahora que falleció eso es lo que dicen de ella.
Pero mientras estuvo viva, ¿alguien se tomó el tiempo de decírselo, de hacerle algún reconocimiento para ver si le levantaban el espíritu? No. ¿Dónde estaban sus amigos, las personas que se suponía la querían? ¿Dónde estaban sus fans? Burlándose de su adicción. “Crack is whack.” Alimentándose de lo controversial y lastimosa que fue su caída de la fama. Nadie le dijo en vida lo que valía y ella, evidentemente, no lo sabía.
“So, goodbye. Please, don't cry.
We both know I'm not what you, you need.”
Nuestro defecto más grande como seres humanos es que no sabemos apreciar lo que tenemos mientras lo tenemos. Somos expertos en acordarnos de lo bueno cuando ya no está.
Un verdadero amigo está ahí en las buenas y en las malas. Comparte lágrimas de alegría, de tristeza, palabras de elogio y crítica constructiva. Son amigos el año entero. No podemos depender de un solo día para expresarnos, ni esperar a que ya no estén.
San Valentín debe ser un día para celebrar lo que ya hemos practicado el año entero. Cuando digamos amor, digámoslo con convicción y digámoslo mucho.
“I hope life treats you kind.
And I hope you have all you've dreamed of.
And I wish to you, joy and happiness.
But above all this, I wish you love.”
Mejor no se puede expresar...
ResponderBorrar